Un sarcófago se refiere a un recipiente, generalmente tallado en piedra, destinado al entierro o albergue de los restos mortales de una persona. Tradicionalmente asociado con prácticas funerarias antiguas, su diseño y material ofrecen protección y respeto hacia el difunto, simbolizando un último lugar de descanso. Esta definición encapsula tanto su propósito histórico como su relevancia en contextos funerarios contemporáneos.